Wednesday, January 12, 2022

Saoco

"Saoco" NO es una palabra de origen africana. Es tan español como el Quijote.

La palabra "saoco" se escucha frecuentemente en las canciones de salsa dura para referirse al virtuosismo espontáneo que alguien manifiesta a la hora de bailar o interpretar un tema de origen afro-cubano. Ya Celia Cruz y la Sonora Matancera nos deleitó con su tema "Saoco". Saoco también es una bebida de origen caribeño que mezcla ron, jugo de coco y un poco de limón. Sin embargo, en la versión que hacen Richie Ray y Bobbie Cruz de "Yo soy Babalú" parece abrirse a otra interpretación muy diferente.

Ay, que yo llamo a Babalú
y él viene pa(ra) acá
porque Babalú conmigo anda.
Que tú me tiras fluidos
y te vas para atrás
porque Babalú conmigo anda.
Ay, que yo traigo saoco
y tú lo verás
que Babalú conmigo anda.

La canción no es sobre el baile ni nada de eso, sino sobre la brujería. Babalú Ayé es un orisha muy peculiar porque es el dios afro-cubano de la enfermedad, un principio negativo. ¿Cómo amar tanto a un dios tan terrible? Pues con mayor razón: hay que tenerlo de mi lado, no en mi contra. Debo caminar al lado de Babalú Ayé. Y si tú me tiras fluidos para mandarme una enfermedad, Babalú te va a echar para atrás porque Babalú conmigo anda.

En brujería existe una planta que sirve para repeler los ataques de magia y ahuyentar las malas energías, y es la planta de saúco. Es posible, pues, que el "saoco" de esta canción se refiera más bien a esta planta. 

En la historia del español es bastante común el intercambio entre "u" y "o". Un ejemplo bastante notorio todavía en el español actual es la alternancia entre "podrir" y "pudrir", ambos aceptados por la Real Academia. En el pasado fueron comunes la alternancia entre "cumplir" y "complir", "subir" y "sobir", "dormir" y "durmir", "morir" y "murir". Un testimonio de esta alternacia antigua se encuentra en la conjugación de estos verbos: decimos "ellos dormían" pero "ellos durmieron". Estas alternancias eran más comunes cuando la vocal alternante caía en sílabas inacentuadas. Muchas de ellas provenían de la U breve del latín.

El caso de "saúco"/"saoco" sería bastante excepcional porque la palabra viene de "sabūcus" con la U larga, y además pasó a ser forma acentuada en español. La razón por la que pudo haberse alternado con O es para mantener el hiato, es decir, la división silábica sa-ú/ó-co. La Real Academia registra tanto "saúco" como "sauco", esta última con acento en la "á". Debido al contacto entre la "a" (una vocal abierta) y la "u" (una vocal cerrada) la tendencia es a convertir esta palabra en diptongo. Es posible que se convirtiera en "saoco" como una forma hipercorrecta para mantener la división silábica.

El sentido de saoco como virtuosismo en el baile y la interpretación pudo haber resultado una extensión metafórica por las propiedades mágicas atribuidas a la planta. También el nombre "saoco" para referirse a la bebida alcohólica puede mirarse como extensión metafórica. Si esto es así, el "saoco" de la salsa es más bien de origen hispano-cubano que afro-cubano, derivado de las pronunciaciones campesinas, alternancias vocálicas y aplicaciones metafóricas.

La palabra "saoco" ya llegó al reggaetón español en la boca de Rosalía: ROSALÍA - SAOKO (Official Video)



Sunday, January 2, 2022

¿Ataúl o ataúd?

"Ataúd" es el cajón donde nos guardan cuando yacemos sin vida en el valle de los acostados. Es el designio último de la Parca para los que tuvieron a bien dejar un dinero para poner a descansar su cuerpo. A los plebeyos les toca una fosa común, un florero o ser carne para las pirañas. Tener un ataúd digno es más un descanso para sus allegados, para los que tienen el privilegio de enterrar a los suyos en un buen cajón, porque los demás ni siquiera se permiten decir esta palabra y dicen "ataúl". De niña yo también entendía "ataúl" y alguna vez alguien me corrigió hasta que lo supe con certeza: es ataúd y no ataúl.

No parece ocurrir lo mismo con otras palabras terminadas en D. No es habitual escuchar "ciudal", "universidal", "libertal"... Digamos que es por influencia de la U, porque la U retrae la lengua más hacia atrás y ocasiona este efecto lingual, como diría una estudiante mía. Entonces debería ocurrir lo mismo con "salud", pero ¿hay quien dice "salul"? No parece una variante tan habitual como "ataúl" si es que alguien diga "salul". Digamos que es por influencia sí de la U en el diptongo. Tal vez la única palabra sería "laúd", y esta no es una palabra que se diga habitualmente. Si alguien la dice, seguramente la conoció por escrito primero y sabe perfectamente que termina en D.

Según el diccionario de la Real Academia, es una palabra de origen árabe. Proviene de  at-tābūt, que significa "cajón" o "cofre". La palabra aparece en el Corán como el lugar donde se depositaron los restos de Moisés.

Si tomamos la etimología, pues, debería decirse como mínimo "atabut", o sea que ya solo "ataúd" está muy lejos del original. En 1650, aparece la forma "atabut" en el CORDE en 1650, y "atabud" en 1349. En cambio, "ataúd" está ampliamente documentado con 976 casos desde 1240. La alternancia entre D y T a final de sílaba es un fenómeno muy común en español que no requiere mucho pensamiento. Por ejemplo, mucha gente dice "ciudat" inadvertidamente cuando trata de pronunciar bien "ciudad". De hecho, el CORDE arroja 5625 casos de "ciudat". Y sí hay casos de "ciudal", pero solo tres: en 1391, 1575 y 1491. De "ataúl" los casos no son tan antiguos, y la mayor parte los escribe Tomás Carrasquilla, quien estaba intentando copiar el lenguaje coloquial. Parece estar documentada en otras áreas del español popular tanto en Zamora, Costa Rica, Argentina, e incluso en Filipinas. Y en Lope Vega aparece un personaje que se llama "Ataúl".

Es muy probable que por ser una palabra de origen árabe se haya afianzado con más resistencia la alternancia con L. De hecho, es posible que desde la introducción del arabismo la T final haya tenido una articulación similar a la L. El sonido representado con el árabe ت  pudo haber tenido una pronunciación lateral faringalizada. Hagan click en el link para escucharlo si el término les resulta misterioso. Entonces los que decíamos "ataúl" de niños o los que continúan diciendo "ataúl" de adultos no estamos tan desfasados. Puede haber una buena explicación para eso.