Friday, December 31, 2021

Duende

El duende es un ser sobrenatural de la cultura hispánica, especialmente importante en la cultura ancestral andina. Es un ser que representa el mestizaje cultural por excelencia porque tiene elementos de seres sobrenaturales del mundo europeo y también del mundo indígena. Siguiendo la teoría de las tierras altas y las tierras bajas de la lingüística, el duende es un ser de tierras altas. Es fácil documentar seres similares en la cultura celta con solo abrir un libro sobre hadas, elfos, brujas, gnomos, leprechaunts, entre otros.

La palabra "duende" es un nombre genérico que puede servir para llamar a muchas clases de seres sobrenaturales. Sí, el duende incluye elfos, gnomos, leprechaunts, y toda clase de gente pequeña que habita en la naturaleza según tradiciones celtas. Y también incluye espíritus del trueno, del agua y de la fertilidad que abundan en las tradiciones indígenas. La base hispánica de la cultura andina es las tierras del Norte de España, las tierras altas, y así el imaginario sobrenatural de este ancestro colapsa con el indígena, y así el duende renueva sus ímpetus mágicos.

¿Qué es el duende? Es un hombre viejo, pero muy pequeño. Es tal vez la contraparte de la Pacha Mama: mientras la Pacha Mama es un principio femenino, el duende encarna un principio masculino que se rebela contra la Pacha Mama. Las descripciones de los duendes abundan, y varían mucho de tradición en tradición.

Sabemos que el duende es viejo porque tiene una barba blanca muy larga que le llega hasta el suelo. Tiene el pelo blanco. Lleva un sombrero muy grande y puntiagudo. Siempre tiene una risa burlona. A veces está fumando un cigarrillo o un pucho de tabaco. Tiene zapatos grandes y puntiagudos, porque sus pies son también muy grandes para su cuerpo. La nariz también es grande y puntiaguda. Mejor dicho, todo lo tiene puntiagudo.

Es un poco vergonzoso decirlo, pero el duende tiene unos testículos muy largos, tan largos que le llegan hasta el suelo. Lleva un bastón en una mano. Y es muy chistoso, le gusta estar haciendo bromas, pero tiene un pequeño problema: es obsesivo compulsivo. Una combinación muy extraña, pero que funciona bastante bien: cuando eres muy desorganizado, el duende puede venir y cambiar de lugar las cosas. Así aprendes a ser organizado.

Las muchachas muy jóvenes tienen que tener cuidado con el duende. El tipo no tiene ningún pudor en llevarse a la muchacha que le gusta por varios días. Pero él es muy caballero y la devuelve a los padres completica. Así más de una que en la época colonial, de gran superstición y represión para las mujeres, alguna excusó su voladita con que el duende la había raptado.

¿Cómo podemos espantar al duende? Es fácil. Pones una guitarra destemplada al pie de tu puerta. Cuando el duende llega, va a tomar la guitarra y va a intentar templarla. No te asustes si cuando te levantes, el duende está todavía en tu puerta tocando esa guitarra. Otra manera es poner un colador o filtro al pie de la puerte. El duende va a tomar el colador y a contar los hoyos uno por uno. O también es posible lanzar muchos granos de fríjol o maíz en el suelo. El duende va a intentar recogerlos uno por uno.

Un pasatiempo muy importante para el duende es el de hacer trenzas. Le gusta hacerles trenzas a las crines de los caballos. Las personas dicen que han visto al duende enredarse en el pelo de los caballos. El resultado es una trenza tan elaborada que es imposible de deshacer. No existe alternativa sino cortar la trenza de los caballos. Hay quienes que recolectan las trenzas de los caballos y las coleccionan juiciosamente como forma de 

La profesora Nery Helena Beca Masaguallí hizo una interesante investigación sobre el duende en la cultua indígena Nasa, al suroccidente de la región andina de Colombia. Su trabajo se titula "El duende que camina en el resguardo de Noviráo: Su aporte como educador cultural en el pueblo Nasa".

Investigadores o no, léanlo que está muy bueno. Trae transcripciones textuales de narraciones orales del pueblo Nasa sobre el duende.

Según su investigación, hay duendes y también hay duendas. Es decir, el duende es un espíritu unisexo que puede encarnar diversos principios según la tradición. El duende puede aparecer ante una mujer embarazada para indicar un designio con respecto al niño que va a nacer. La mujer debe consultar a un líder tradicional o The Wala para interpretar el designio. También puede aparecer ante un niño muy pequeño para indicarle un camino especial. El niño ha sido escogido para desempeñar un papel importante en la comunidad.

Mi abuelo contaba que había visto al duende. En la finca donde él vivía, él y sus hermanos vieron un anciano muy pequeño que venía caminando por la pared de la cocina. Cuando vieron sus pies, estos no tocaban el suelo. El duende veía volando.

Otra tradición que contaba mi esposo era mucho más terrorífica. Dos personas venían caminando por el descampado. De repente, escucharon un niño que lloraba. Se acercaron a la fuente del llanto, y vieron un bebé abandonado. Lo tomaron en brazos para ayudarlo. Entonces el bebé les habló con una voz de viejo: "Métame los dedos en la boca para ver si tengo dientes".

Thursday, November 25, 2021

San Giving

Los cubanos en Estados Unidos usan la palabra "San Giving" o "San Givi", como si fuera el Santo de los cubano-americanos. Esto se da porque la palabra inglesa "Thanks" tiene una pronunciación muy parecida a la ese, pero con la lengua puesta entre los dientes incisivos superiores. Los cubanos lo reinterpretan como "San" no solo por la pronunciación, sino por reinterpretarlo al modo católico. Este San Giving debe ser el Santo de Dar cosas, dirán los cubanos.

El día de Thanksgiving es una celebración angloamericana que ocurre el último jueves de noviembre cada año con el propósito de reunir a la familia en torno a la cosecha del año y dar gracias por la cosecha. El nombre viene de "Thanks"=gracias y "Giving"=dar, o sea que es el día de dar gracias. En español se traduce como el día de acción de gracias.

Según cuenta la leyenda, el primer Thanksgiving ocurrió en 1620 en Massachusets cuando un grupo de peregrinos tuvo su primera cosecha y compartió una cena con los indígenas aliados a ellos. Para algunas personas es un día que celebra la reconciliación entre los pueblos diversos, para otras personas celebra la derrota y sumisión de los pueblos nativos de América. Es decir, para muchos pueblos indígenas es un día de luto más que de alegría.

Si el Halloween es el día pagano de la cosecha, el Thanksgiving es el contrapeso cristiano a ese día pagano. Es una fiesta que celebra los valores familiares cristianos que implica ser estadounidense. Por esta misma razón, es una fiesta de la colonialidad. Parece que se celebró informalmente antes de que Abrahan Licoln la instituyera como fiesta oficial a finales del siglo XIX. 

El movimiento que se forma al rededor de esta fiesta es tan intenso que los aeropuertos colapsan, el tráfico se acelera, los supermercados se llenan de frenesí por gente tratando de comprar el pavo, la gente se deprime si no puede viajar a su casa a pasar el Thanksgiving con su familia. Mucha gente ni viaja en la navidad para ver a su familia. Pero el Thanksgiving no lo pueden pasar solos por nada del mundo. 

La cena de Thanksgiving ocurre a las 2 de la tarde. Se reza una oración y todas las personas dan un discurso sobre las cosas por las que van a dar gracias. Se parte el pavo, se comparte un montón de pasabocas, y al final de la cena, la familia se reúne a ver la película "El cuento de navidad" basada en la novela de Charles Dickens. Después los niños salen a jugar al parque. Ya la mayoría de las casas están decoradas para la navidad. Es el preludio de la navidad.

Entre las 2 y las 4 de la tarde no funciona nada. No hay carros. No hay tiendas abiertas. Pero a eso de las 5pm empiezan a abrirse las tiendas otra vez. Mejor dicho, hay gente que trabaja en los supermercados por la mañana, van a su cena de Thanksgiving, y luego vuelven a trabajar por la tarde. Pero los más privilegiados se toman toda la semana sin trabajar ni estudiar.

Es muy difícil siendo extranjero resistirse a ese revuelo que ocurre al rededor. Los latinos terminan sucumbiendo al poder de la fiesta. Como es de esperarse, no hay que hacer nada religioso para sumarse a la celebración, y tampoco hay que ponerse a asar un pavo sin sabor si hay fríjoles negros, si "ya está sancochada la yuca, ya está el mojo pal lechón" como dice Ibrahim Ferrer en su "Guateque campesino". Y si Juan Ramón fue en busca de plátano verde y pintón, ya se caen los taburetes y la talanquera.

En colegios y universidades, se da un receso de una semana completa para que la gente pueda descansar o viajar en el Thanksgiving. Después del regreso, se dan dos semanitas de clase que son más bien caóticas y listo para los finales. Mucha gente empieza a viajar desde una semana antes, y otros ni siquiera regresan para la semana de clases, sino ya para los finales. Mejor dicho, los que pensaban que los colombianos tenemos muchos días festivos no han visto esto.

Los latinos a veces lo llaman "Turkey Day" o "Día del pavo" para burlarse del día de Thanksgiving, pero igual lo celebran. Pero los cubanos lo llaman seriamente el "San Giving", pero como lo hemos escuchados de viva voz, el "San Givi". Es como si "Giving" fuera el capitalismo, el día de dar dinero, el día de dar regalos, el día de comprar, de entregar mi ofrenda al mercado global. Es el día del San Capitalismo.

Y el viernes negro. Es el epítome del capitalismo. Cuenta la leyenda que el viernes después de Thanksgiving las tiendas no vendían nada. Entonces se instituyó el Viernes Negro o Black Friday, para incentivar la compra. Es un día especial de enormes descuentos donde mucha gente se pelea por entrar de primero a Walmart a comprar ese televisor que han estado esperando todo el año por comprar. Mejor dicho, el viernes negro es el verdadero San Givi.

Y es que en Estados Unidos, cuando hay descuentos, son descuentos de verdad. El 50% el precio original o el 50% sobre un descuento anterior del 30%. A veces es hasta 70% sobre un artículo que ya estaba descontado.  Por eso muchos trabajadores salen directo de su cena de Thanksgiving a preparar el Walmart para los descuentos del otro día. Pero lo cierto es que los descuentos duran toda la semana, o dos semanas más, incluso se juntan con la navidad.

Me parece bastante honesto el viernes negro en Colombia sin Thanksgiving. Es como decir: bueno, vamos a ser honestos y a tomar solo la parte del capitalismo que tiene esta celebración. Nada de cosa cristiana ni nada. Ahora bien, ¿son los descuentos en Colombia descuentos de verdad? Lo dudo mucho.

En la semana de Thanksgiving, los estadounidenses aprovechan para botar lo viejo, limpiar la casa, y abrir espacio para las cosas que vienen por Navidad y por Viernes Nengro. Es un ritual que llaman el "Fall Cleaning" o "Limpieza de otoño". Hay quienes incluso ofrecen servicios para hacer el fall cleaning. Es decir, hay que botar para abrir espacio para lo que hay que comprar. Finalmente, como dirían los cubanos, sí es un San Givi con toda la intención de la palabra.


Wednesday, November 24, 2021

Trigueño versus moreno

La canción "Yo me llamo cumbia" dice con mucho orgullo "mi piel es morena como los cueros de mi tambor". El color oscuro de la piel se erige como un elemento de identidad caribeña como cuando dice 

"Yo nací en las bellas playas caribes de mi país
Soy barranquillera, cartagenera, yo soy de allí
Soy de Santa Marta, soy monteriana, pero eso sí
Yo soy colombiana, oh, tierra hermosa donde nací"

La canción usa el término "morena" y no "trigueña", que también se refiere a la tonalidad oscura de la piel que no llega a ser pura como la piel del afrodescendiente subsahariano. Tampoco parece referirse a la raza puramente indígena, sino a una tonalidad indistinta que es derivada de todas esas razas.

La palabra "trigueño" viene de la palabra "trigo". Ser "trigueño" es ser como del color del trigo maduro, de tonalidad marrón, como dice la RAE. Por su parte, la palabra "moreno" tiene una etimología más compleja, pues se relaciona con la palabra "moro" o el término coloquial para referirse a la persona del África del norte que colinda con España.

Según la RAE, "moro" es alguien que proviene de "Mauritania", que luego se aplicó a cualquier persona musulmana. Entonces, ser "moreno" se refiere no a un color de piel, sino a una etnicidad, a una mezcla más abstracta que el ser "trigueño". No es que "moreno" signifique ser musulmán, sino que es oscurito como el musulmán.

Otra conexión que se puede establecer desde la música es la palabra "moreno" como ser oscuro como las moras. Lola Flores lo trae en su canción "La zarzamora":

"En el café de Levante
Entre palmas y alegrías,
Cantaba la Zarzamora.
Se lo pusieron de mote
Porque dicen que tenía,
Los ojos como las moras."

Es misterioso el uso de "moras" en este sentido, pues es posible que esté aludiendo a "mora" como el fruto de la zarzamora, o a "moras" como las mujeres de origen árabe. O a lo mejor el doble sentido es intencional.

¿Qué piensa usted sobre la diferencia entre "moreno" y "trigueño"? Escríbame a mi correo o coménteme por aquí.

Friday, October 29, 2021

Osquítar, Varguitas

 "Dígale a Varguitas", el tratamiento más condescendiente para referirse a un empleado que lleva muchos años trabajando en el mismo puesto en trabajos manuales o de vigilancia. El apellido de la persona es "Vargas", pero el diminutivo es "Varguitas". Es decir, se pone el diminutivo antes de la "s".

Nótese que los diminutivos van siempre al final de la base de la palabra, aunque la palabra termine en ese. Por ejemplo, si fuera alguien francés, diríamos un "francesito" no "un francitos". Y obviamente se dice "vaca" y luego "vaquita", "bajo" entonces "bajito", "gorda" y el diminutivo es "gordita". Se añade el sufijo "it" y al final se añade la marca de género. Y si es plural, la marca de plural va después de la marca de género: "flaquitas", "gorditas", "vaquitas"... Es decir, el diminutivo no es "ito" o "ita" sino el sufijo "it" al que se añade la marca de género y luego la marca de plural.

Lo que me parece más curioso y extraño en el caso de "Varguitas" es que la base de la palabra es "Vargas" y la "s" no marca plural. "Vargas" es el mismo caso de "francés", que terminan en ese, pero la ese no marca plural, sino que la ese es parte de la base de la palabra. Sin embargo, sí diríamos "un francesito" pero no "Vargasito". Aunque habrá quién dirá "Vargasito" por ahí.

El hecho es que la existencia de "Varguitas" es un fenómeno bastante peculiar. El diminutivo "it" ya no se pone al final, sino que se pone en medio de la base de la palabra. Se convierte en un infijo. Un infijo es básicamente un sufijo que se pone en medio de la base de la palabra. 

Pensé en otros ejemplos de este caso y estos fueron los que se me ocurrieron:

  • Óscar - Osquítar
  • Ómar - Omítar
  • Carlos - Carlitos
  • Bolívar - Bolivítar
  • Héctor - Hectícor
  • César - Cesítar
  • Harold - Harítol
  • Vargas - Varguítas
  • Víctor - Victícor
  • Édgar - Edguítar
Ahora miremos otros ejemplos similares, primero con infijo, luego con otras posibilidades como sonarían:

  • James - Jamitos - Jamesito
  • Flores - Florítos - Floresito
  • Gladis - Gladítas - Gladisita
  • Dámaris - Damarita - Damaritas - Damarisita
  • Ester - Estícar - Esterita
  • Martínez - Martinítoz - Martinecito
  • David - Davitod - Davidcito
  • Abel - Abitol - Abelito
  • Aldemar - Aldemítar - Aldemarito
  • Osmer - Osmítor - Osmerito
  • Nieves - Nievitas - Nievesita - Nievesitas
  • Raúl - Rauítol - Raulito
  • Salvador - Salvadítor - Salvadorito
Digamos que todos son posibles, porque siempre a alguien se le puede ocurrir un diminutivo raro, pero no suenan tan natural como los primeros ejemplos.

Si nos atenemos a estos datos, entonces tenemos que los diminutivos infijales se usan solo en nombres propios masculinos de dos sílabas con acento en la penúltima sílaba termiandos en "a" o "o" + "l", "r" o "s". 

"James" podría decirse "Jamitos", pero sería más natural "Jamesito" porque termina en "e" + "s", no es un "a" ni una "o". Lo mismo pasa con "Flores". En "Gladis", tal vez "Gladitas" sería posible, pero "Gladisita" suena más natural, porque es nombre de mujer. Sin embargo, es posible que simplemente yo nunca lo haya escuchado muchas veces porque no es un nombre muy común. Y nombres de mujeres terminados en "s", "r" o "l" de dos sílabas con acento en la penúltima sílaba no parecen muy comunes. No pude encontrar otro sino "Gladis". En cambio "Carlos" se usa tan comúnmente como "Carlitos" siguiendo las mismas condiciones, con la única diferencia de que es nombre de hombre. 

Ahora bien, los nombres terminados en acento agudo o en la última sílaba parecen no recibir bien el infijo, aunque "Aldemítar" podría aceptarse. En cambio "Salvadítor" suena bastante exótico y rebuscado. Pero en cambio se oye tan comúnmente decir "Harítol" y menos "Harolito". La única diferencia es que "Salvador" tiene tres sílabas y es palabra aguda.

Me gustaría conocer sus apreciaciones sobre el particular, sobre todo si tiene anécdotas de diminutivos por el estilo que contribuyan a mejorar mis datos.

Halloween

El Halloween es obviamente una fiesta de origen católico. La palabra inglesa "Halloween" viene de "Hallow" que se relaciona con el moderno "holy" o "sagrado", y "een" que era una forma de "even" o "eve" que significa víspera. Era la fiesta para festejar la fiesta de todos los santos que viene el primero de noviembre y el dos de noviembre.

El día de los muertos que se celebra en México está relacionado con el día de todos los santos. El culto a los santos en el imaginario católico no es más que una manifestación del viejo culto a los muertos, a los ancestros. Rezar a un santo que fue una persona de carne y hueso es rezarle a un difunto. Y esto tiene que ver con los cultos paganos al que el catolicismo impuso su imaginería.

La coincidencia cosmológica tiene que ver con la época de la cosecha en el hemisferio norte. Por eso, la calabaza es el símbolo de la cosecha. Sin embargo, las tradiciones comunes del Halloween como los disfraces, la decoración en torno a los muertos, la lámpara de calabaza que se pone al pie de la puerta, todo eso viene de los celtas.

El origen del Halloween es la fiesta celta del Samhain, lo cual está bastante bien documentado. Es un día de gran actividad espiritual porque es cuando se acercan más el mundo de los vivos y el mundo de los muertos. Probablemente los misioneros católicos crearon el día de los muertos con el fin de colonizar la festividad pagana. Tanto es así que el Papa otorga indulgencias plenarias para que las almas del Purgatorio pueden llegar al cielo.

No es una fiesta tradicional en Colombia, sino una fiesta que llegó relativamente tarde, tal vez a finales de 1970. Es posible que la fiesta haya entrado primero en Bogotá, pues todo lo nuevo entra por la capital por los mayores contactos con el exterior, y posteriormente se expandió a las ciudades. El hecho es que mis tíos y padres no se disfrazaron en Halloween, yo sí, pero no de bebé. Si esto es asi, yo tuve mi primer Halloween a mis tres años, o sea en 1980.

Mi suegra me dice que lo del Halloween en Bogotá ya estaba ocurriendo por allá por 1970, y en Cali, ella disfrazó a sus hijos allá a finales de la década de 1970. El hecho es que estoy tratando de documentar la entrada de la fiesta del Halloween en Colombia, así que si usted tiene información, escríbame a adiazcoll@gmail.com



Tuesday, July 27, 2021

Festejación

¡La esposa del presidente dijo "festejación"! Se indignaron todos los súbditos del rey de España, y fueron a preguntarle a la honorable Real Academia Española si la dicha súbdita del dicho virreinato del Perú tenía permitido decir "festejación". Pues bien, la RAE dijo que sí, que le daba permiso. Pero yo creo que esto no dejó contentos a los monarquistas. Mejor dicho, sí, los dejó contentos, para probar que un gobierno surgido de las profunidades del pueblo andino era indigno de tan alto honor de ser presidente y primera dama del Peru. Y se pegaron de la forma de hablar.

Esta situación sería el Paraíso de Bourdieu, el sociólogo francés que habló sobre cómo todo lo que hace la gente de clase baja se percibe como malo, indeseable, detestable, horrible, vulgar... El "gusto" no es más que una percepción de lo que es agradable y que se da por sentada, pero solo sirve para legitimar la gente de clase alta como una esencia admirable. No lo es, no hay una esencia de la gente con "clase". Lo que hay son unos gustos y prácticas difundidos para que todos creamos que ellos son superiores por naturaleza. De ahí que se critique de la clase baja la forma de vestir, la forma de hablar, las maneras, el carro en que se mueven, etc.

Yo creo que la palabra "festejación" suena raro porque ya existe la palabra "festejo" como sustantivo. Entonces agregar "ción" suena a la sustantivación de la sustantivación. Y observen, puedo decir "sustantivo" y "sustantivación". Cuando le agrego "ción", le doy una connotación más dinámica. También se puede pensar que está calcando la derivación desde "celebración", porque no es posible decir: "no hubo ningún celebro". Es como cuando decimos "tengo un pálpito" versus "tengo una palpitación": la primera se nota más metafórica, la segunda más literal.

En muchos casos el doblete produce formas que significan cosas diferentes:

"colecta" versus "colección"
"grupo" versus "agrupación"
"recibo" versus "recepción"
"instrumento" versus "instrumentación"
"reparto" versus "repartición"
"parte" versus "partición"
"pálpito" versus "palpitación"
"sustantivo" versus "sustantivación"

En otros casos la forma sin -ción no se utiliza:

"evacúo"* versus "evacuacíon"
"educo"* versus "educación"
"celebro"* versus "celebración"
"deporto"* versus "deportación"
"circulo"* versus "circulación"
"recopilo"* versus "recopilación"

En otros la forma con -ción no se utiliza:

"siembra" versus "siembración"*
"ruptura" versus "rompición"*
"asesinato" versus "asesinación"*
"suicidio" versus "suicidación"*
"pregunta" versus "preguntación"*
"examen" versus "examinación"(?)

Como vemos, la razón por la que se permite o se prohíbe -ción es tan arbitraria que toca preguntarle a la corona real si deja usarla. Pero mi hipótesis es que para la primera dama existe tanto "festejo" como "festejación", pero posiblemente "festejo" se refiera a las fiestas tradicionales del pueblo, mientras que "festejación" significa cualquier otra fiesta, tal vez de carácter protocolario como se sugiere en la entrevista. Y una "celebración" tal vez es una fiesta más espontánea, como un encuentro entre amigos. 


Wednesday, July 21, 2021

Has, haz, as

 Una de las confusiones más habituales para hablantes del español de América es la diferencia entre "has". "haz" y "as". La "s" y la "z" suenan igual. La "z" tiene esa connotación de estilismo al lado de la vulgar "s" que tendemos a menospreciar como ordinaria y común.

"Has" es la conjugación de segunda persona del verbo "haber" que sirve para hacer el presente perfecto. ¿Alguna vez has comido carne cruda? Sí, varias veces he comido carne cruda. Me gusta el jamón. ¿Cuántas veces te has accidentado en bicicleta? Te has pasado con eso. No has hecho nada de lo que te pedí. Has molestado todo el día, ya cálmate.

En el pasado "has" se escribía "as", sí, así, sin hache, porque esa hache nunca ha sonado. Si acaso alguna vez sonó en el latín, pero durante toda la edad media y colonia nunca sonó en esa palabra. Lo que pasa es que en el intento por estandarizar el idioma en el siglo XVIII se retomaron algunas grafías del latín, y se reintrodujo la "h". 

"Haz" con "z" es el imperativo informal afirmativo del verbo "hacer". Algunos imperativos en español perdieron la "e" final" tal vez por influencia de dialectos orientales cercanos al catalán. Si pueden notar los imperativos de "tú" son iguales a la tercera persona del presente de indicativo. Por ejemplo: "él canta todos los días" y "tú, canta, por favor". O "mi marido vuelve a las 5pm" y "vuelve ya!". Hagan el experimento con imperativo de "tú" afirmativo (no metan el de negación, porque esa es otra larga historia) y verán que funciona.

Pues bien, el experimento no funciona para verbos como "tener" y "poner" en "tú". Si se siguiera la regla general, se diría "Tiéneme la cartera, por favor" o "póneme esto por ahí, por favor". Pero aún así hay quien dice así, pero no se considera parte del español estándar. En "El carnero" (1637) yo encontré un caso de "tiéneme la capa" que le dice un señor viejo al autor cuando estaba niño. Pero como digo, la forma general sería "ten" y "pon": "tenme la cartera" o "ponme eso por ahí".

La forma regularizada sería "háceme el favor" (no confundir con el vos "hacéme el favor" porque esa también es otra larga historia). La forma estándar sería "hazme el favor". En español peninsular la "c" sí tiene un sonido diferente de "s", que es la articulación interdental: la lengua entre los dientes delanteros es lo que suena tan españolete, pero solo en lo que se escribe con "z", "ce" o "ci".

Otra estandarización ortográfica, pues, fue no permitir la "c" al final de la sílaba porque entonces eso sonaría como "k", caso de extranjerismos como "coñac", que nadie pronunciaría "coñás". Por eso se usa "z" en vez de "c" para los sonidos interdentales finales de sílaba. Por eso quedó "haz" y no "hac" para el imperativo de "hacer": "Haz tus tareas", "haz lo que tengas que hacer", "hazlo ya, pero hazlo".

En español de América se perdió la distinción entre "z" y "s" aproximadamente para los siglos XVI o principios del XVII, pero la convención se mantuvo para la escritura cuidada y formal. Claro que los escribanos seguían cometiendo esos errores una y otra vez. Fue necesaria la estandarización del siglo XVIII, pero aún así (como todo nos llega tarde) los escribanos solo empiezan a evidenciarlo hasta el siglo XIX o más tarde. 

Otros significados menos habituales de "haz" con zeta son con el sentido "atado de trigo", que viene del "fascis". También "Tropa ordenada o formada en unidades", del latín "acies". Y "cara o rostro", del latín "facies". Esta se relaciona con el sentido de "haz" como uno de los lados de la hoja. Busquen aquí: https://dle.rae.es/haz

El merdadeo y el hablante obviamente que juega con estos sentidos y similitudes, y todo esto puede confundir más al pobre aprendiz de ortografía americano. Por ejemplo, la conocida marca "haz de oros" juego con la idea del "as de oros" de los naipes y el sentido de "haz" referido al trigo.

Y por último está la palabra que sí se escribe sin hache que es "as" y se refiere a los naipes. Al parecer en latín era "assis", una moneda romana, y se define así en el diccionario: "En la baraja o el dado de póquer, elemento marcado con una sola señal". Yo siempre pensé que era "as" era el plural de la A al que se refería. Pero todos nos damos sorpresas. ¿A que siempre escribías "haz" porque se veía más bonito?


Monday, June 7, 2021

Zapote o sapote (color)

El zapote es una fruta de tamaño mediano, de color anaranjado por dentro y de pulpa muy fibrosa, con semilla grande como la del aguacate. En mi niñez recuerdo que mi abuela compraba zapote o sapote, pero no recuerdo qué se hacía con eso. Pensaba que era para sopas y cremas, pero eso era el zapallo. El zapote es para jugos, dulces y salsas. Sin embargo, vengo a hablar de la palabra "zapote" para referirse al color zapote. En español de Colombia se usa la palabra "zapote" para referirse a cualquier cosa de color... bueno, zapote.

No conozco otra variedad del español que use la palabra "zapote" para referirse al color de manera general como en Colombia. En Colombia el color zapote o sapote es cualquier tono anaranjado. En español de Colombia se usa incluso el diminutivo "zapotico" para referirse a algo de color aproximado al naranja, o un objeto pequeño de color naranja. 

En español general se usa la palabra "naranja" y el origen de esta palabra como color viene de la fruta, la naranja, pero esta palabra no concuerda en género y a veces ni en número. Se dice, por ejemplo: "compré unos pantalones color naranja", o "compré unos pantalones naranjas" o "unos pantalones naranja". 

La palabra "zapote" viene de la lengua indígena nahuatl "sapotl", que era una palabra que se usaba para referirse a cualquier fruto dulce, según la etimología que trae el diccionario de la Real Academia. Se aplicó al nombre de la fruta específicamente, y así se difundió en español. Se encuentra documentada en el CORDIAM con la ortografía "sapote" en el siglo XVIII en Salvador, y "zapote" en el mismo siglo en México. en el CORDE (Corpus Diacrónico del Español) también se encuentra la palabra "zapote" referida al árbol o a la fruta en los siglos XVIII y XIX en México, y curiosamente en el español de Filipinas.

La primera documentación de "zapote" viene de México en 1611: "Consuelda de indias es arbol grande con ojas como zapote" (El libro de las medicinas caseras, de fray Blas de la Madre de Dios), pero es un libro de un español en Filipinas, lo que demuestra que la palabra ya estaba bastante arraigada como para que los españoles la usaran en todas sus colonias. Y probablemente porque en Filipinas existiría una fruta y árbol parecido o bastante cercano al del zapote. Esto según mi consulta en el CORDE (Corpus Diacrónico del Español).

También está en 1650, con la ortografía "zapote", 

"Mandó el gobernador juntar a todos aquellos indios, que era mucha cantidad, junto a un árbol grande que llamaban zapote que estaba en medio de la plaza, y allí mandó hacer justicia de ellos. Cortaron a unos las narices, a otros las orejas, y manos, y un pie, y luego les curaban con aceite hirviendo las heridas; ahorcaron e hicieron esclavos a otros, y a los que salieron ciegos y mancos de haber visto la santa visión de Santiago, muy bien hostigados los enviaron a sus tierras; y fue tal castigo, que hasta el día de hoy jamás volvieron a la ciudad" (Fragmentos de una historia de la Nueva Galicia, CORDE).

Se encuentra en Guayaquil en 1774: "El zapote es árbol diferente del frutal que tiene este mismo nombre, da una goma que usan en la provincia los tintoreros, de la que llevan mucha a Lima" (Descripción de Guayaquil, Francisco Requena). Esto se puede tomar como evidencia de que en el siglo XVIII ya estaba difundida en español andino, y probablemente en Colombia.

En Colombia aparece escrita por primera vez en Tomás Carrasquilla, y con la ortografía "sapote", en La marquesa de Yolombó: " mientras trasplanta un sapote y ella hace que lee" (1928, CORDE).

Para referirse al color, Google no parece muy agradecido con la palabra. Aparece en una página de México (https://www.comex.com.mx/colormes-zapote). Es un artículo sobre decoración del hogar que se titula "Zapote, un color que estimula la convivencia", pero parece referirse a un tono más oscuro o mate que anaranjado: "Zapote es un color de la familia de los naranjas, se caracteriza por promover la convivencia, la creatividad, el entusiasmo y el apetito. Su cálida energía resulta ideal para usar en lugares de interacción como salas, terrazas y cocinas".

En Colombia, por otro lado, según mi apreciación de hablante nativa, el zapote puede referirse a cualquier tono de naranja. De hecho, usar la palabra "naranja" o "anaranjado" me suena demasiado sofisticado o hasta pretencioso. Pero no estoy segura qué dicen las nuevas generaciones hoy en día. Nací en 1980.

El origen de los nombres colores pasa por la fascinante historia de las metáforas y la sinestesia. El azul, por ejemplo, dice el diccionario de la Real Academia que viene del árabe hispánico "lazawárd" y este se remite al sánscrito "rajvarta" que signifca "rizo del rey". Y "negro" (latín "niger, nigre") probablemente por semejanza con las personas que habitaran la cuenca del río Níger. "Amarillo" viene del latín hispánico "amarellus" y este es diminutivo del latín "amarus" que significa "amargo". De manera que el naranja es ácido y el amarillo es amargo aunque los colores en sí no se puedan comer. Pero la transferencia de los sentidos permite nombrar nuevas cosas.

Los nombres de los colores pasan por un proceso que se llama en lingüística funcional "lexicalización". Es decir, comienzan siempre mostrándose la metáfora o la comparación de manera evidente. Después, por la frecuencia con que se usa la metáfora, los hablantes empiezan a olvidar la metáfora y la palabra se convierte simplemente en el nombre del color. 

Por ejemplo, cuando el nombre del color se encuentra todavía en estado de metáfora se tiene que agregar la palabra "color", como "compré unos pantalones color najanja" y la palabra "naranja" no puede modificarse en género ni en número. No se dice "*compré unos pantalones color naranjos", no. Esto porque para el hablante todavía es evidente que se está refiriendo a la naranja como fruta para hacer la comparación. Después puede empezar a omitirse la palabra "color", pero la palabra "naranja" permanece invariable "compré unos pantalones naranja". Si acaso puede empezar a asumir el número "compré unos pantalones naranjas", pero no en género.

En el caso de "zapote", yo siempre he escuchado "zapote" sin la palabra "color" e incluso "zapotes" o "zapoticos": "ay los zapaticos eran zapoticos más lindos" me imagino a alguien diciendo. Por terminar en "e", no va a cambiar el género porque la "e" es género neutro en español. Aunque siempre es posible seguir añadiendo la palabra "color", el hecho de que se admita la omisión y se pueda concordar en género y número es relevante para mostrar que es una palabra ya bastante extendida para referirse al color. Es más, sospecho que las nuevas generaciones conocerían la palabra "zapote" ya solo como color, y en la medida que no haya abuelas haciendo sopa de zapote o sapote habrán olvidado la metáfora original.

Y la Real Academia admite las dos escrituras: "zapote" o "sapote".


Thursday, April 8, 2021

Coca

En todos los pueblos indígenas andinos, no solo entre los quechuas, existe alguna tradición sobre el uso de la coca. El uso de la coca es sagrado. Las hojas de coca se ponen debajo de la lengua y se mascan lentamente. Permite llenar el cuerpo de energía para trabajar duro o para soportar largas caminatas en las montañas más altas. Las hojas de coca fortalecen los pulmones para proveer de oxígeno al organismo. Otros pueblos indígenas consumen la coca como infusión en té. Los indígenas nasa del suroccidente colombiano venden la coca en forma de té.

Las hojas de coca en su estado natural no son alucinógenas. El problema es cuando se sintetiza la coca con otras sustancias químicas y para hacer la cocaína. El consumo de coca es una tradición andina profundamente afectada por la ilegalidad del cultivo de coca. La fumigación de las plantaciones de coca no solo produce daños en el medio ambiente, sino en el estilo de vida de los campesinos e indígenas, y rompe con una tradición milenaria.

La palabra "coca" es de origen quechua, por lo tanto se considera un quechuísmo del español. Las hojas de coca eran muy importantes para la cultura andina porque eran una manera de establecer los fuertes nexos con la tierra o la Pacha Mama. La palabra "coca" ha dado muchas vueltas hasta llegar a convertirse en la base de la "cocaína" o la "Coca Cola". La Coca Cola en sus orígenes tenía hojas de coca. Yo crecí pensando que cuando tomaba Coca Cola, estaba consumiendo cocaína.

Existe una crítica contra el consumo de coca, de chicha o de bebidas alcohólicas entre los indígenas. Aunque la chicha y la coca sí se consumía entre los indígenas, parece que este consumo iba en contra de las políticas oficiales del gobierno Inca. Es cierto que los españoles sí se beneficiaron de promocionar el consumo de bebidas alcohólicas o sustancias psicoactivas entre los indígenas porque esto debilitaba mucho la cohesión social de los indígenas. El alcoholismo es una situación que hace sufrir a las familias profundamente, rompe los lazos sociales y debilita a la comunidad.

Los indígenas en la actualidad defienden su derecho a producir y consumir la hoja de coca como parte de su cultura ancestral. Pero existe una paradoja respecto a este derecho: se puede interpretar como el resultado del mestizaje cultural. Es decir, el uso de la coca es ancestral, pero la práctica actual resulta del contacto con la cultura hispánica.

Existe un manuscrito titulado "Relación de la coca, de su origen y principio", anónimo, del siglo XVII. El autor narra que la palabra "coca" para los indígenas quechuas era el nombre de una esposa mítica del Inca en tiempos inmemoriales. Mamá Coca murió joven, y la enterraron con una "guaca" o un grupo de objetos sagrados. El Inca ordenó hacer sacrificios de chicha y de sangre. Un día, de la tierra brotó un arbusto. Este arbusto era la planta de coca.

El Inca era el único que mascaba coca. El Inca a veces le ofrecía coca a sus allegados, personas nobles o altos funcionarios de gobierno. El pueblo no tenía permitido mascar coca. El autor anónimo del manuscrito narra que los españoles fueron los que empezaron a promocionar la coca entre los indígenas. Las hojas de coca eran muy buenas para dar energía en el trabajo. Los españoles notaron rápidamente que los indígenas trabajaban mucho más tiempo si mascaban hojas de coca.

El debate es demasiado complejo como para que yo pueda emitir una opinión clara e informada. Yo tendría que investigar más sobre las prácticas culturales relacionadas con la coca en Perú y Bolivia, por ejemplo. Sin embargo, pienso que el consumo cotidiano de coca sin el componente ritual es resultado de la colonización. Se necesita de un guía espiritual auténtico para consumir coca apropiadamente. Y aún así, creo que no todos están preparados para la experiencia espiritual de la coca. Yo no estoy preparada.

RELACIÓN DE LA COCA Y DE SU ORIGEN Y PRINCIPIO Y POR QUÉ ES TAN USSADA Y APETECIDA DE LOS INDIOS NATURALES DESTE REYNO DEL PIRU María Brey y Víctor Infantes (introducción y edición) Bogotá: Instituto Caro y Cuervo,1996, il., 64 p.

Boletín del Museo del Oro, Banco de la República, Nº 40, Bogotá, 1996 (editado 1998), pp. 145-148